He leído en un blog un artículo interesante en el que el autor hace una reflexión sobre la Escuela que había soñado cuando estudiaba Magisterio, y lo que se ha encontrado en la realidad.El artículo lo podéis encontrar en Escuela2018.
Lo triste de esas reflexiones, es que en realidad lo más parecido a eso que describe, yo lo he encontrado, pero en la Escuela Privada, no en la Escuela Pública, que es a la que tenemos tod@s derecho.Es una pena, pero los que estamos trabajando en la pública seguiremos en la brecha para lograr una educación de calidad.Es todo un reto, ya que los colegios privados cuentan con una financiación por parte de los padres que matriculan allí a sus hijos. La escuela pública cuenta con los fondos públicos que le son asignados y que a todas luces se ve, año a año, que son insuficientes, así es que las autoridades educativas deberían tomar nota de ello, y ver la realidad de nuestros centros, para mejorar todo lo posible.
Todos esos problemas no nos van a desanimar a los profes que estamos dispuestos a trabajar duro por una escuela pública de calidad, que permita a nuestro alumnado salir al mercado laboral en las mismas condiciones que el resto. Aunque estemos lejos aún de conseguirlo.
Tus reflexiones sobre la escuela son realistas y motivadoras. Como docente, a veces tienes la sensación de que te vas quedando sol@ en la lucha pero palabras como las tuyas nos recuerdan que esto merece la pena y que a veces, sólo a veces, es la profesión más bella de la tierra, gracias ;-)
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